viernes, 24 de enero de 2014

Hay que aprender a distinguir entre el hambre físico y el hambre emocional. Hay diferencias. Y sería bueno conocerlas. Reconoce el hambre físico y el hambre emocional. Todos somos culpables de agarrar algo y comerlo para satisfacción puramente emocional. Antes de llegar a ese paso, que con el tiempo te llegas a sentirte mal, piensa en la emoción que tú sientes después de comer.

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El hambre físico viene en forma gradual y puede posponerse. Con cualquier tipo de comida podemos estar satisfechos y una vez que estamos llenos, podemos dejar de comer. Además causa satisfacción y no culpa.

Mientras que el hambre emocional es repentino y urgente. Causa antojos específicos, por ejemplo: pizza, chocolate o helados. Comes más de lo que deberías y te sientes incómodo. La culpa se apodera de ti.

Hambre Físico vs Hambre Emocional.

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